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¿Podrían los ciclistas que matan peatones en el Reino Unido ser procesados de igual forma que los conductores de vehículos a motor?

Nueva ley dirigida a los ciclistas que conducen de manera temeraria con resultado de atropello y muerte de peatones.

El Gobierno ha propuesto recientemente una nueva ley dirigida a los ciclistas que conducen de manera temeraria con resultado de atropello y muerte de peatones. Dicha ley propone someter a los ciclistas “peligrosos” el mismo tratamiento procesal que a los conductores de vehículos a motor en circunstancias similares. Se espera que dicha ley se añada al proyecto de ley de transportes que se presentará al Parlamento en otoño de 2022.

El objetivo de esta nueva propuesta de ley es concienciar a los ciclistas del daño real que pueden causar cuando el exceso de velocidad se combina con la falta de cuidado. En otras palabras, la ley pretende hacer frente a una «minoría egoísta» de ciclistas que no parece haber entendido del todo los riesgos de circular de forma temeraria, o que pareciera que se creen «inmunes» a los semáforos en rojo.

Esta propuesta de ley llega cuatro años después de que el Gobierno realizara una consulta sobre propuestas de nuevos delitos de lesiones graves o muerte mientras se circula en bicicleta.

En la actualidad, la 1991 Road Traffic Accident Act (ie. Ley de Tráfico de 1991) prevé una multa máxima de sólo 1.000 libras por circular de forma imprudente o de 2.500 libras por hacerlo de forma peligrosa. Si estas acciones acaban causando daños personales a una persona, los ciclistas también podrían ser procesados por “conducción temeraria y furiosa” en virtud de la 1861 Offences Against the Person Act (ie. Ley de Delitos contra la Persona de 1861), cuya pena máxima es de hasta dos años de prisión. La 1988 Road Traffic Act (ie. Ley de Tráfico de 1988) también reconoce como delito circular en bicicleta por una carretera o en público bajo los efectos del alcohol o las drogas, lo que da lugar a una multa máxima de apenas 1.000 libras.

Aunque es bastante raro que los peatones mueran o resulten gravemente heridos como consecuencia de la conducción peligrosa de un ciclista -según un informe parlamentario publicado en 2020, en 2019 solo se registraron cinco muertes de peatones en las que estaba implicada una bicicleta, frente a los 48 ciclistas y 305 peatones que murieron por culpa de los coches en el mismo año-, se espera, no obstante, que la inclusión de este nuevo delito simplifique el sistema legal y traiga cierta tranquilidad a los familiares de los fallecidos o heridos graves por ciclistas.

En este sentido, el Departamento de Transportes del Gobierno británico declaró recientemente:

«Cualquier muerte en nuestras carreteras es una tragedia, y aunque tenemos algunas de las carreteras más seguras del mundo, el gobierno se ha comprometido a hacerlas aún más seguras. Estamos estudiando cambios que permitan procesar a los ciclistas peligrosos con mayor facilidad, ofreciendo rutas ciclistas más continuas y directas en las ciudades, separadas físicamente de los peatones y del tráfico motorizado.»

Aún nos encontramos a la espera de la publicación del proyecto de ley de transportes. Sin embargo, dado que la nueva Primera Ministra se ha comprometido públicamente a mejorar las conexiones de transporte, se espera que la misma apoye el proyecto de ley en su versión actual, que en principio se espera que sea publicado en los próximos meses.